Pie de cría en la lombricultura

Se denomina pie de cría a la cantidad de lombrices necesarias en cuanto a peso, o en cuanto a número que permite efectuar una siembra y facilita obtener una población de lombrices fuertes para ser cultivadas, teniendo en cuenta el material acompañante (substrato) que le sirve de hábitat y alimento.

En cuanto a peso se debe sembrar 2 Kg. de lombrices por 1 m2 de superficie. En cuanto al número de lombrices según la experiencia acumulada de ha demostrado que sembrando cinco mil lombrices por m2 de cultivo a los tres meses se obtienen desde once mil a dieciséis mil lombrices.

El pie de cría cuando se transporta a grandes distancias se debe hacer en cajas, las que deben poseer preferiblemente 60 cm de largo x 30 cm de ancho x 25 cm de alto, son de madera sin cierre hermético para facilitar la ventilación de la excreta y de las lombrices.

Las lombrices no deben permanecer por más de 72 horas en las cajas de transportación y se debe cubrir la parte superior de la superficie de la excreta donde está el pie de cría con papel para conservar la humedad necesaria, la que a su vez sirve de alimento a las lombrices durante el viaje.

Se ha comprobado que el pie de cría se puede trasladar por aire o por tierra sin que se afecte durante la transportación, aun cuando se efectúa entre países.

No obstante lo anterior y cuando la distancia a recorrer no es mucha se puede trasladar el pie de cría en cualquier recipiente siempre que se mantenga buena alimentación, temperatura y humedad y que el lugar donde se va a ubicar se encuentre previamente preparado.

Fuente: Manual para la producción de abonos orgánicos en la agricultura urbana – Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).