Corbata

Hay dos estilos principales de corbatas para hombre: la formal y la informal. Las corbatas formales incluyen las corbatas de lazo, que pueden ser atadas a mano o presentarse ya atadas, las corbatas largas de nudo corredizo y las corbatas Ascot o corbatas de estilo inglés, cuyos extremos, una vez anudados, se cruzan por el frente y se sujetan con un fistol.

La corbata de lazo se usa para ocasiones formales con smoking y con ropa formal y ropa para hombre de negocios. Cuando la moda lo decreta, las corbatas Ascot son para uso formal o semiformal de mañana o de tarde con el chaqué o levita. Las corbatas informales son las usuales corbatas largas de nudo corredizo con extremos en punta o rectos.

Además del estilo y apropiabilidad de una corbata, la durabilidad del material y la confección son también importantes. Las fibras, hilos, tejidos y procesos de acabado afectan las cualidades de uso.

Por lo que se refiere a la confección, los dos tipos de construcción son elásticos y rígidos. La corbata de construcción elástica es cosida a máquina con puntadas largas como hilvanes que permiten mayor elasticidad en la hilatura que la que se obtiene con las puntadas cortas, bastante apretadas de máquina de la construcción rígida. Las corbatas tipo rígido son baratas.

Para determinar si una corbata tiene construcción elástica, tómela con los dedos pulgar e índice de cada mano y tire con suavidad en direcciones opuestas a lo largo de la corbata; observe cuánto da de sí. Otros puntos a considerar en la confección son las costuras a lo largo de los extremos y la uniformidad de los dobladillos.

Una corbata hecha de una tela cortada al sesgo mantendrá mejor su forma que una tela cortada en sentido recto del material. Si la tela exterior es cortada al sesgo, el forro deberá cortarse de la misma forma también. Así mismo, una corbata forrada con lana tiene mayor elasticidad y por consiguiente conserva su forma durante más tiempo que una corbata forrada con algodón. Una corbata bien hecha tiene cuatro o cinco dobleces en el extremo más ancho. Una corbata con revestimiento en los extremos tiene una apariencia mejorada porque no muestra costuras.

Las corbatas hechas de telas de tejido pie y trama permanecen mejor atadas que aquellas de tela de tejido de punto. Hay menos deslizamiento del nudo, especialmente en el caso de punto de rayón. Las corbatas de tejido de punto lucen bien y no se arrugan.

Las corbatas de rayón, acetato, algodón y seda cargada se arrugan bastante y no caen bien. Las telas de lana y seda pura son excelentes para la fabricación de corbatas porque son resistentes al arrugamiento y elásticas a las manchas, hacen una buena tela para corbatas.

Fuente: Apuntes de Confección de ropa de caballero de la Unideg