Identificación macrocualitativa de fibras por solventes

La mayoría de las pruebas de este tipo se llevan a cabo en vasos de precipitados de 50 ml. Previo desengrase intenso de ellos, así mismo, todos los agentes de acabado deben ser removidos.

Las fibras de muestra deben estar tan sueltas como sea posible, y cuando se trate de telas, estas deberán ser destejidas y los hilos cortados en longitudes de 1” y destorcidos.

Una vez colocadas en el vaso de precipitado, las fibras se tratarán con el primero de los solventes indicados en la siguiente tabla y se observará la tendencia de la fibra a disolverse.

En el caso de tratarse de un solo tipo de fibra, será relativamente sencillo observar si después del tiempo de inmersión aconsejado, la muestra ha sido disuelta, o no es afectada.

Es recomendable el uso de su agitador de cristal para indagar si las fibras han sido disueltas, ya que en ocasiones por estarse empleando un solvente con el mismo índice de refracción que la fibra, éstas parecen haber sido disueltas totalmente sin estarlo en realidad por que al filtrar el solvente quedan residuos de fibra.

En el caso de las mezclas de fibras, es más complicado percatarse si alguna de las fibras ha sido afectada, sobre todo si la proporción en que estaba integrada la muestra era muy pequeña.

Por esta razón, la inspección visual se ha descartado y se refiere después de que el tiempo de inmersión ha pasado, remover las fibras y vaciar el solvente en un gran volumen de agua fría. La formación de un precipitado (separación de materia sólida), es una indicación de que algo ha sido disuelto.

De ser así, la muestra deberá ser sumergida en una pequeña cantidad del solvente, seguida de un intenso lavado en agua que contenga un poco de detergente no iónico. La muestra debe entonces ser secada y trata da con el siguiente solvente del mismo modo, hasta que esté completamente disuelta o la lista de solventes se encuentre terminada.

La mejor manera de llevar acabo la micro identificación de las fibras, es empleando un microscopio con amplificación de 100 veces.

Nuevamente es necesario que las fibras a examinar sean desengrasadas, desengomadas y estén libres de todos los agentes de acabado.

Las muestras se disponen en un porta objetos de la manera habitual, pero sin emplear medio de montaje y una vez que ha sido colocada en el microscopio y enfocado se agregará una gota del primer solvente, sin perder de vista la transformación que tenga lugar en la muestra, ya que dependiendo de la fibra y el solvente empleado, el cambio puede ser cosa de segundos o tardar de 10 a 15 minutos.

En el caso que el solvente requiera calentarse a temperaturas más altas que el medio ambiente, existen dos maneras de llevarlo acabo:

1. Para solventes que requieran calentarse a temperaturas por debajo del punto de ebullición del agua, el mejor método es emplear un generador construido de un matraz.

El porta objetos es calentado sosteniéndolo directamente sobre la salida del vapor de tal manera que éste toque sobre un punto directamente bajo las fibras y solvente.

El porta objetos debe ser secado del fondo o base antes de someterlo al examen.

2. Para solventes que necesitan calentarse a temperaturas más altas que el punto de ebullición del agua, el método más satisfactorio escalentar una vasija con arena limpia a la temperatura requerida, lo cual se puede checar con un termómetro, retirar la fuente de calor y cuidadosamente colocar el porta objetos sobre la arena el tiempo necesario. En la mayoría de los casos la arena sostendrá su temperatura por eltiempo requerido.

Después de que cada solvente haya sido aplicado a las fibras sobre el pota objetos y su acción observada, las fibras deberán ser lavadas con agua, conteniendo un poco de detergente no-iónico, hasta que no exista residuo del solvente , y entonces intensamente secado antes de aplicar el siguiente solvente.

Fuente: Apuntes de Fibras materiales textiles de la Unideg