Clasificación de requerimientos

De manera tradicional, existe la clasificación que se hace de requerimientos de dos tipos:

Requerimientos funcionales los cuales especifican funciones que el sistema debe ser capaz de realizar, sin tomar restricciones físicas a considerar.

Requerimientos no funcionales los cuales describen atributos del sistema o atributos del ambiente del sistema. También son conocidos como de delimitación o de calidad.

QFD (Quality Function Deployment) es una técnica de administración de calidad que traslada las necesidades del cliente en requerimientos técnicos de software. Desarrollada y utilizada por primera vez en Japón por Mitsubishi Heavy Industries a principio de la de la década de 1970. QFD enfatiza lo que es realmente valioso para el cliente y lo pone en el proceso de ingeniería.

Se identifican tres tipos de requerimientos:

Requerimientos normales. Las metas y objetivos son establecidos durante las reuniones con el cliente. Si los requerimientos se presentan entonces el cliente se encuentra satisfecho.

Requerimientos esperados. Estos requerimientos son implícitos del producto y es posible que el cliente no los establezca. Su ausencia puede ser la causa de insatisfacción en el cliente.

Requerimientos extra. Son características que van más allá de las expectativas del cliente provocando una mayor satisfacción cuando se presentan.

Fuente: Apuntes de Ingeniería del Software de la FCA de la UNAM