Visión para inspirar y comunicar

La visión permite dar claridad sobre lo que se quiere decir y adónde se desea llegar. En la toma de decisiones estratégicas,  la visión es la pieza de dominio que golpea a la misión, estrategias, etc.- hasta llegar al resultado final, conforme el tema que nos ocupa: crear clientes satisfechos y lograr ventajas competitivas.

El nuevo enfoque en formulación de estrategias.  es lograr ventajas mediante la creación de valor para el cliente, así como por la diferenciación de los productos y de la imagen que proyecta la empresa. dicho enfoque señala, como paso inicial, contar con una visión sobre lo que se quiere alcanzar en un periodo a largo plazo. Una visión así tratada se convierte en un detonador para cristalizar resultados.

Una buena visión conduce al logro de importantes ventajas competitivas.

Una de las primeras medidas que los gerentes deben tomar para mejorar su eficacia es hacer visualizar lo que pretenden lograr.

El tratamiento que se le da a la visión. parece tener en primer término, el propósito de resaltar la labor de equipo, a partir de la integración del cuerpo directivo. Este equipo representa el modelo a seguir, a partir de lo que comunique a los demás, mediante la visión que tenga de su empresa, de la misión formal de la misma y de sus acciones personales, que son las que más hablarán.

Una visión estratégica es de importancia crítica para el éxito empresarial en el actual ambiente de los negocios. Los ejecutivos de todos los niveles deben trabajar conjuntamente y tener una clara y funcional visión estratégica. Ellos deben tener una objetiva comprensión de la visión y deben comunicarla efectivamente a cada miembro de la organización.

Es indudable que la visión frecuentemente ignorada es vital para la gerencia y para su liderazgo, porque bien definida, dirigida y comunicada a los demás, motiva a estos para cumplir la razón de ser de la organización-misión. En cambio, sin una clara visión -y mucho menos sin una clara misión- los empleados carecen del elemento unificador de esfuerzos así como de la inspiración para una entrega total.

La visión así entendida, se convierte en un mecanismo de alta gerencia, para que, por medio de su personal, delínee y construya su empresa en la forma como esa gerencia quisiera que fuera. Esto implica que la visión debe fundirse con la cultura organizacional, todo lo cual dependerá del liderazgo que ejerzan quienes se encuentran en las posiciones directivas.

Otro prototipo de tener una visión,  es hacer que su contenido llegue a formar parte de la cultura organizacional y proporciona un marco, tanto para establecer los objetivos estratégicos,  como para formular los planes que lleven a la consecución de esos objetivos. Bajo este concepto, la comunicación de la visión es tan importante como  como su formulación, por lo que ambas debieran plantearse clara y formalmente como parte del esquema estratégico considerando que el receptor inmediato es el personal de la empresa.

Fuente: Apuntes de Empresas computacionales del Instituto Tecnológico de Apizaco