Almacenamiento de la Leche

Las industrias lácteas deben disponer básicamente de tres tipos n’ sistemas de almacenamiento de la leche:

1° Depósitos de recepción de la leche cruda.

2° Depósitos de tratamiento, normalización y mezcla.

3° Depósitos de regulación entre etapas de los procesos de fabricación.

El acero inoxidable es el material preferentemente utilizado por sus indudables cualidades higiénicas, reuniendo ventajas tales como:

– Pueden construirse los depósitos de acero inoxidable en volúmenes que oscilan desde unos pocos litros hasta más de un millón.

– Pueden aislarse, con lo que guardan la leche a la temperatura deseada.

– Pueden encamisarse para efectuar toda clase de tratamientos térmicos (enfriamiento, calentamiento), haciendo pasar fluidos frigorígenos o calefactores por los circuitos.

– Los depósitos de acero inoxidable se amoldan muy bien a los sistemas automáticos de limpieza.

– Pueden ser de diseño horizontal o vertical, cerrados o abiertos, de diseño higiénico, etc.

– No transmiten olores ni sabores extraños a la leche.

– Se les pueden incorporar toda clase de accesorios (boca de hombre, termómetros, indicado-res de nivel, grifos toma mues tras).

– Pueden construirse depósitos asépticos para conservación de la leche UHT y otros productos lácteos.

Los depósitos de las industrias lácteas se construyen principalmente en acero inoxidable AISI 304 o AISI 316. El primero lleva un 18 % de cromo y un 8% de níquel. El AISI 316 lleva, además, una pequeña proporción de Molibdeno (2-3 %), que le da más resistencia a la corrosión.

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Depósitos de recepción y almacenamiento de leche en una industria. (Cortesía de GEA-Ahlborn).

Normalmente, la leche cruda recién llegada a la central se almacena en grandes depósitos 30.000 a 500.000 litros). Estos depósitos, por necesidades de espacio, se pueden instalar fuera de las naves de la industria. En este caso, deben aislarse para conservar la leche a la temperatura adecuada.

Fuente: Apuntes de Industrialización de productos lácteos de la UNIDEG