Circulo de éxito, círculo de fracaso y juego de la vida

El secreto del éxito se esconde en intentar no fracasar dos veces seguidas. Lograrlo sólo es posible con la confianza que nos permite resistir a los vaivenes de las derrotas y las victorias, tanto en los negocios como en los deportes, la política o la vida.

Aunque no puede garantizarnos siempre el éxito, la confianza nos empuja a esforzarnos más, a superar nuestros límites, reponernos de los reveses y permanecer en el juego a pesar de todos los obstáculos que encontremos.

La única faceta positiva de los fracasos es que hacen sonar la alarma que nos despierta de la autosatisfacción y nos incita a la acción: un ataque al corazón nos puede inducir a seguir un régimen o practicar ejercicio; un revés financiero nos puede obligar a reconsiderar algunas ideas preconcebidas sobre cierto negocio.

La línea divisoria entre los círculos de éxito y de fracaso pasa por la elección del comportamiento que exhibiremos ante los primeros descalabros que suframos. Si optamos por fortalecer la responsabilidad personal, el respeto por los demás y el deseo de hacer algo significativo, las posibilidades de ganar serán mayores; si nos atrincheramos en comportamientos autodestructivos, la espiral del fracaso marcará todos los acontecimientos siguientes de nuestra vida.

En las elecciones que hacemos en la vida, nuestro carácter ejerce un peso significativo. Lo que da forma al carácter son los valores frente al mundo que nos rodea. Las personas con carácter han interiorizado las tres piedras angulares de la confianza y forman su base frente a la adversidad.

La vida se compone de altibajos y los círculos de éxito y fracaso empiezan y terminan. Es la fuente de nuestra resistencia ante la adversidad y de nuestra elección por trabajar hasta borrar toda dificultad. La confianza nos anima al trabajo sacrificado que hace posible la victoria. Fuente: Libro la Confianza por Rossabeth Moss Kanter