Comunicación interpersonal

La comunicación se realiza entre dos o más personas y permite transmitir un mensaje que es la información que el instructor que podemos asimilar a un emisor envía al oyente que llamaremos receptor.

La respuesta o la reacción del receptor se denomina feed-back (retroalimentación). Por lo tanto, los principales elementos de la comunicación interpersonal son el emisor y el receptor. El emisor es la persona quien inicia la comunicación. Tiene ideas, experiencias o conocimientos nuevos para compartir con su audiencia.

En toda capacitación, el comunicador tiene la función de:

– Exponer sus ideas en un lenguaje claro a su interlocutor. Para ello, debe conocer el idioma o el dialecto, el contexto cultural, el nivel intelectual y las preocupaciones de su interlocutor;

– Seleccionar el medio más adecuado y simple para llegar a su interlocutor;

– Cerciorarse de que su interlocutor haya recibido y comprendido correctamente el mensaje y de que actuará conforme al objetivo fijado inicialmente. Por lo tanto, el instructor debe explicar a los participantes el papel que deben desempeñar en su oficio.

Los participantes que reciben la información deben ser capaces de captar y comprender el mensaje. Su papel consiste en recibir y conservar el mensaje y luego actuar poniendo en práctica las recomendaciones. Para esto, sería necesario que el mensaje pueda convencer a los participantes de la capacitación y que el propio instructor inspire confianza.

A tal efecto, el mensaje debe brindar soluciones adecuadas a los problemas del sector de la venta de alimentos en la vía pública. Para que un mensaje sea eficaz, debe llegar a la conciencia, incluso al estado de ánimo del individuo, y acercar el instructor a su auditor. De esta manera, pueden en conjunto encontrar las soluciones a los problemas que se les presentan.

El mensaje debe ser verdadero, bien expresado y pertinente. Su contenido debe ser objetivo y lógico. El operador, productor-vendedor, debe sentirse involucrado y obligado a actuar.

Cuando el productor-vendedor toma conciencia de la importancia del mensaje, de lo que implica para su vida y la de la comunidad, se decide a actuar, a abandonar sus malos hábitos y a encontrar la o las soluciones al problema planteado.

Aquí el objetivo del instructor es una mejor comunicación con el fin de lograr en un futuro no lejano una modificación de conducta en materia de higiene alimentaria.

Fuente: Buenas prácticas de higiene en la preparación y venta de los alimentos en la vía pública en américa latina y el caribe, FAO