Las cinco formas de enseñar a los niños pequeños

Enseñar a los niños pequeños demanda apelar a formas particulares que respondan a las necesidades y características propias de los bebes y niños menores de 3 años.

En los tres primeros años de vida se enseña a hablar, a caminar, a comer, a jugar, a compartir juguetes, momentos, a disfrutar de cuentos, poesías, canciones, a dibujar, a lavarse las manos solos, a confiar, entre otros tantos contenidos más.

Estos aprendizajes que se logran en el devenir cotidiano en situaciones hogareñas de un modo natural, cuando constituyen parte de la responsabilidad de las instituciones educativas de la primera infancia han de ser objeto de enseñanza, por lo tanto los adultos han de diseñar espacios, situaciones, tiempos, interacciones que promuevan la adquisición de estos logros de modo intencional.

La intencionalidad educativa docente a su vez exige la construcción de formas de enseñar apropiadas evitando la exportación de modalidades propias de enseñanza para niños mayores.

Reconocemos cinco formas de enseñar que conforman modos de ayudar a aprender a los niños menores de 3 años. Estas son: enseñar mediante

1) la realización conjunta de acciones,
2) ofreciendo disponibilidad corporal,
3) participando en expresiones mutuas de afecto,
4) acompañando con la palabra y
5) construyendo escenarios.

El adulto ofrece su cuerpo y su palabra para acompañar las expresiones mutuas de afecto y la realización conj unta de acciones en escenarios diversos en los que se desenvuelve el devenir cotidiano. Según sea la intencionalidad del adulto en relación con lo que se proponga enseñar se dará preponderancia a una u otra forma de enseñar. Fuente: Libro de grandes temas para los más pequeños de la OMEP