Los escritorios y su distribución

El espacio de los escritorios está diseñado y limitado para un solo estudiante con un cuaderno y en ocasiones un libro. En general no queda suficiente espacio para una computadora de escritorio.

La CPU puede colocarse debajo de la mesa, pero esto es algo incómodo ya que, por ejemplo, la mayoría de las computadoras tienen la disquetera, la unidad de CD-ROM, el botón de encendido y los conectores en la parte frontal de la carcaza de la CPU, y algunos conectores están incluso en la parte posterior, por lo cual es difícil (si bien los estudiantes lo encuentran divertido) manipular estos elementos debajo del escritorio.

Actualmente tenemos monitores con pantallas de CRT cada vez más grandes (por ejemplo, de 17 pulgadas), que son más difíciles de ubicar en los salones de clase que las de 14 ó 15 pulgadas.

Las pantallas de LCD son más finas y más cómodas para los entornos educativos y, si bien en general son más costosas, su precio está bajando, y tal vez se trate de la mejor opción.

El teclado siempre debe estar al alcance de la mano del alumno y requiere bastante espacio. Sin embargo, la posición normal del teclado es debajo de la altura normal del escritorio, por lo que una opción interesante es colocar una especie de bandeja extraíble debajo del mismo.

Es importante que los cables de red y de energía no interfieran con los movimientos físicos en el salón de clase o en el auditorio. Una idea interesante es, por ejemplo, utilizar un proyector portátil, pero debe tenerse cuidado al colocar los cables, para evitar que los estudiantes se tropiecen durante la clase.

En muchos casos, el cableado es un problema importante para la instalación de las TIC, ya que puede ser muy costoso. Si bien no es absolutamente necesario, los pisos eleva-dos permiten reconfigurar fácilmente los salones de clase.

La disposición tradicional de los salones funciona muy bien cuando la computadora está integrada al escritorio, pues los cables quedan bien escondidos, permitiendo que los pasillos sean más angostos, al tiempo que facilita el acceso a las interfaces de redes y a los tomacorrientes.

Una idea interesante en cuanto al diseño de los escritorios, es construir un escritorio triangular, lo que también permite al estudiante mirar alternadamente al docente y a la pantalla con más comodidad.

Los escritorios que se utilizan en los salones de clase pueden ser móviles, lo que permite cambiarlos de lugar dentro del salón según la actividad.

Por ejemplo, los escritorios individuales triangulares pueden reorganizarse y formar mesas hexagonales para el trabajo grupal.

En las clases donde se utilizan las computadoras en forma extensi-va, el mobiliario se puede disponer de diferentes formas:

• en filas
• en forma de “L”
• en forma de “U”
• en grupos de 4 escritorios
• en grupos de 6 escritorios Fuente: Libro de las Tecnologías de la información y la comunicación en la enseñanza de la UNESCO.