Hágalo fácil

A menos que pretenda ganar un Óscar por sus esfuerzos, intente que el proceso resulte sencillo y divertido para todos los implicados. Primero, decida cuántas cintas de formación quiere realizar. Es mejor producir una serie de cintas, cada una de una parte específica de un tema amplio, que una cinta que intente abarcarlo todo.

Por ejemplo, si bien puede producir una cinta larga para los auxiliares que incluya todo lo que necesitan saber acerca de sus técnicas, es más inteligente realizar una serie de cintas, y que cada una trate una única técnica o trabajo. Así podrá verse un segmento específico cuando se desee o lo necesiten. Resulta mucho más fácil mirar una cinta de 5 o 10 minutos que otra de una hora; la cinta más corta se asimila, comprende y recuerda mejor. Téngalo en cuenta a la hora de realizar la cinta y determine lo puntos que pretende mostrar de forma rápida y concisa.

Fuente: Libro de Odontología estética por Ronald E. Goldstein, volumen 1.