La política, la economía y el derecho como factores determinantes de la actividad del estado

La política, como primer elemento integrante de la actividad del Estado, se conceptúa como la ciencia social que tiene por objeto normar las actividades de los grupos humanos encaminadas a lograr su cohesión, y el orden y la defensa de sus intereses comunes, con el propósito de conseguir su superación. Por su parte la ciencia económica es aquella disciplina por medio de la cual el grupo social aprende cómo se produce la riqueza material, cómo se distribuye y cuáles son las mejores formas de consumo. En los Estados modernos, la economía ha ido ascendiendo peldaños entre las actividades indispensables del hombre y del grupo social, hasta colocarse en un lugar privilegiado por razones simples. Cada vez el grupo social es más numeroso, en una alarmante proporción inversa con la existencia de riquezas materiales. Por tanto, cada día se debe repartir esta menor riqueza entre más hombres, lo que produce entre el grupo social una sensación de necesidad que cada vez hace más indispensable la presencia de las reglas económicas en casi todas las actividades que desarrolla la sociedad humana, así como la presencia de los órganos estatales en la orientación, dirección, regulación y hasta control de los fenómenos económicos.

En efecto, la presencia de órganos estatales más eficaces y eficientes, como rectores del grupo social, se ha convertido en una necesidad imperiosa para la tranquilidad y el progreso de los pueblos, cuyo poder se mide por la potencialidad económica del país en que están asentados. El derecho, por su parte, es el conjunto de normas jurídicas de carácter imperativo-atributivas, que rigen la vida y conducta de las personas, cuando éstas se manifiestan dentro del grupo social. En los pueblos modernos se ha confirmado como el instrumento rector no sólo de las relaciones política, sino también económicas y sociales en general, de los individuos entre sí, de éstos para con el Estado, y de los diversos Estados entre sí.

Una vez esbozados estos tres importantes factores: la política, la economía y el derecho, se puede estar en condiciones de combinar los elementos componentes de cada uno de ellos para tratar de determinar el contenido de la actividad del Estado, la cual varía en el espacio y en el tiempo, ya que los factores económicos, políticos, jurídicos, culturales y sociales determinan el balance de la actividad estatal. Dicha actividad comienza desde el momento en que el Estado trabaja para proveer los elementos necesarios para su propia existencia, hasta aquel en que organiza y satisface en mayor o menor grado, las necesidades de la sociedad humana que le da vida y razón de ser . Es evidente que para que el Estado pueda realizar sus actividades, con los medios y recursos económicos necesarios para hacerlo. Así se ve como esa entidad política comienza por extraer el mayor provecho económico de sus bienes propios; continúa por explotar debidamente los recursos naturales y la riqueza nacional, y culmina obligando a los particulares a contribuir económicamente para el desarrollo de la actividad estatal.

En resumen, el contenido de la actividad del Estado consiste en: allegarse importantes cantidades de recursos económicos para realizar su objetivo fundamental, que es la procuración del bien común mediante la satisfacción de las necesidades que experimenta la colectividad. Esa función estatal ha recibido a través de las épocas históricas recientes, en que se empezó a estudiar con rigor científico el contenido de la actividad del Estado, diversos nombres; sin embargo, la denominación más utilizada es la de atribución . Este término se refiere a la forma y manera de cómo el Estado se encuentra no sólo facultado, sino también obligado a realizar dentro del marco legal de su competencia jurídica, una serie de actividades encaminadas a logra la satisfacción del bien común. Aún cuando éstas funciones se ven atendidas y solucionadas a tiempo, o todo lo contrario, se detenga su proceso por la burocracia que existe en el poder y las políticas que sirven a intereses de unos cuantos es necesario tocar este punto que a continuación se desarrolla.