Llegada y estacionamiento del bombero al lugar del siniestro

Un punto muy importante a considerar siempre es el estacionamiento de los vehículos, que deberán disponerse de forma que se permita su rápida salida ante cualquier emergencia.

La disposición de los vehículos y medios de todos los servicios de emergencia que lleguen al lugar deberá realizarse de forma tal que no se entorpezcan entre ellos o interfieran en sus distintas labores y que guarden entre sí las suficientes distancias.

A la llegada al lugar del siniestro, cada componente, si el Jefe de la Dotación no ha ordenado nada en contra, deberá realizar con efectividad y prontitud la preparación del material y cada misión específica asignada.

Para ello habrá un sitio para cada cosa y cada cosa estará en su sitio, de forma que se optimicen los medios y equipos necesarios.

Como ejemplo en el caso habitual de incendio en viviendas o siniestro que requiera la utilización de equipos de respiración autónomos, estos deben ubicarse en el vehículo de tal forma que permita que dos de los Bomberos de la salida, al menos, bajen de la cabina del vehículo con los equipos ya colocados, permitiendo la inmediata intervención en el caso de posibles personas afectadas.

Del material de cada vehículo y su entrega, control y recuperación para la intervención, será responsable el componente de la dotación que designe el Jefe de Salida.

Todo el material a utilizar en el siniestro, deberá encontrarse en condiciones de uso, habiendo sido revisado y puesto a punto previamente en el Parque.

En casos especiales, como en accidentes de mercancías peligrosas, deberán guardarse las distancias mínimas de seguridad para el estacionamiento de los vehículos de intervención.

En este paso de la llegada y estacionamiento, y sobre todo en grandes siniestros en los que puedan participar vehículos de otros servicios (ambulancias, policía,…), será fundamental la colaboración de la Policía en la retirada de elementos o vehículos que interfieran nuestra labor, así como en el propio estacionamiento ordenado de nuestros vehículos y acordonamiento de la zona.

Incluso, en caso necesario, habrá que cortar o regular el tráfico, mediante la Policía Local o Guardia Civil, tanto para garantizar la seguridad de las personas como para facilitar las maniobras de los vehículos de emergencia en la zona de siniestro.

Fuente: Manual S.E.P.E.I. de Bomberos, Publicaciones de la Diputación
de Albacete