Evaluación y traslado de heridos

Ante cualquier siniestro la actuación de los Bomberos tendrá como objetivos prioritarios:

1º. Evitar que en ese lugar ocurran más accidentes en cadena.
2º. Socorrer a las posibles víctimas utilizando para ello el material con que se esté dotado, no produciendo mas daño ni sufrimiento.
3º. Procurar un traslado adecuado a las víctimas.
4º. Atacar el siniestro para neutralizarlo.

Nuestra intervención consistirá en prestar unos PRIMEROS CUIDADOS a un accidentado o enfermo repentino, en el lugar de los hechos, hasta la llegada de personal especializado que complete la asistencia.

En primer lugar hay que hacer una evaluación encaminada a conocer el número de víctimas producidas (pensando en víctimas ocultas), así como a reconocer aquellas circunstancias que pueden dificultar o requerir medios especiales para realizar la evacuación.

Establecer un orden de prioridades para la atención primando, lógicamente, al mas grave.

Extremar las medidas de precaución en el manejo de accidentado, en esta fase en la que todavía no sabemos con certeza lo que le ocurre ya que podríamos causar daños mayores y empeorar su estado.

El auxilio de cualquier víctima comienza por realizar la EVALUACIÓN INICIAL DEL PACIENTE.

Fuente: Manual S.E.P.E.I. de Bomberos, Publicaciones de la Diputación de Albacete