R.C.P. en traumáticos

El protocolo explicado hasta ahora es para cualquier individuo que presente esos síntomas pero sin que haya evidencia de traumatismo (golpe, accidente), si es así, las técnicas son similares, pero nuestra actuación se guiará por la siguiente norma:

“MOVER AL ACCIDENTADO SOLO LO NECESARIO”

De modo que al aproximarnos a los heridos deberemos comprobar si están o no conscientes. Si está consciente tendremos que tener especial precaución y empeño en inmovilizar la columna vertebral de ese herido, por poco importante que nos parezcan sus lesiones.

Si está inconsciente deberemos comprobar, tal y como se encuentre, si respira o no. La ausencia de respiración es el único caso que nos permitirá el moverlo sin agotar las medidas de inmovilización para realizarle la R.C.P, siguiendo las secuencias vistas anteriormente.

En caso de traumático inconsciente pero que respira, procederemos a inmovilizarlo en espera de poder extraerlo del interior del vehículo garantizando el alineamiento cabeza-cuello-tronco.

Fuente: Manual S.E.P.E.I. de Bomberos, Publicaciones de la Diputación de Albacete