Clase 6. Sustancias toxicas e infecciosas

Con el término genérico de productos tóxicos e infecciosos se denomina a una enorme variedad de productos que, muchas veces, no tienen afinidades químicas ni características físicas comunes, y que sólo presentan en común el que son tóxicas e infecciosas para los humanos y los animales.

Además, dentro de esa toxicidad se distinguen facetas distintas del peligro, pues hay tóxicos por inhalación, por ingestión y por absorción cutánea.

Clasificación:

Clase 6.1. Materias toxicas

Son sustancias que afectan al organismo pudiendo producir lesiones reversibles o irreversibles e incluso la muerte (cloro, ácido cianhídrico, cianuros).

Clase 6.2. Sustancias infecciosas

Son sustancias que contienen microorganismos viables, o sus toxinas, capaces de producir o causar enfermedades a las personas y a los animales.

La mayor parte de estas mercancías corresponden a residuos de animales, como pieles, cuernos, animales enfermos, peces y mariscos en mal estado, etc.

Clasificación en función de su toxicidad:

El criterio de esta clasificación se establece por el Reglamento de Clasificación, envasado y etiquetado de mercancías peligrosas que marca las concentraciones que definen el carácter de muy tóxicas, tóxicas o nocivas.

Prevenciones Clase 6.1:
– Protección personal y respiratoria
– Evitar fugas
– Cuidado con los tóxicos que, además, sean inflamables
– Absorber y contener los derrames con arena o tierra
– Evitar contaminación
– Evacuar zona de intervención
Emergencias Clase 6.1:
– Derrames
– En caso de goteo o derrame, no tocar el producto derramado, evacuar al per- sonal salvo el necesario para proceder al taponamiento
– Utilizar protección respiratoria
– Emplear arena limpia y seca para absorber o retener lo derramado
– Evitar contaminación
– Incendios
– Tener en cuenta que casi todas las materias tóxicas, al arder, producen vapores también tóxicos.
– Para la extinción, emplear agua en abundancia para refrigerar recipientes y abatir o disipar vapores.

El principal problema puede venir en los casos de inhalación de los vapores o gases, pues si se salen de sus recipientes, el control de riesgo será muy difícil.

Si la fuga se produce en zonas urbanas el riesgo es todavía mayor, porque la nube venenosa puede difundirse y afectar a personas que, incluso, no estén en las inmediaciones.

Prevenciones Clase 6.2:
– Protección personal y respiratoria completas
– No se debe beber ni comer en las proximidades
– Prever descontaminación posterior
Emergencias Clase 6.2:
– Derrames
– Ventilar si es un espacio cerrado
– Protección personal y respiratoria
– Evacuar la zona
– Limpiar y fumigar posteriormente
– Incendios
– Evacuar la zona
– Protección personal y E.R.A.
– Emplear agua pulverizada, evitando diseminar el producto con la utilización de grandes chorros de agua.
– Mantener al personal con el viento de espaldas
– Desinfección
– Usar hipoclorito en proporción de 1.000 a 10.000 ppm (no es eficaz para los bacilos tuberculosos)
– Desinfectantes fenólicos (no son eficaces para virus)
– El alcohol es efectivo contra protozoos y parásitos

Fuente: Manual S.E.P.E.I. de Bomberos, Publicaciones de la Diputación de Albacete