Juan Carlos I

Juan Carlos I (1938- ), rey de España (1975- ), figura emblemática del proceso de transición española a la democracia después de una larga dictadura y símbolo del final de las heridas abiertas desde la Guerra Civil que había tenido lugar entre 1936 y 1939.

Hijo de Juan de Borbón y Battenberg, conde de Barcelona desde 1941, y de María de las Mercedes de Borbón y Orleans, y por tanto nieto por parte paterna del rey español Alfonso XIII, el anterior monarca de la Casa de Borbón que había sido destronado en 1931 con la proclamación de la II República. Nació el 5 de enero de 1938 en Roma, donde residía la Familia Real española exiliada.

Tras pasar su infancia en Lausana (Suiza) y en Estoril (Portugal), llegó a España en 1948 en virtud de un acuerdo entre su padre y el general y jefe del Estado español Francisco Franco para completar su educación. Ésta incluyó su paso desde 1955 por las tres academias militares y, entre 1960 y 1961, por la Universidad Complutense de Madrid, donde cursó estudios de Derecho Público e Internacional, Economía y Hacienda Pública.

Proclamado rey de España el 22 de noviembre de 1975, Juan Carlos I representó desde el comienzo de su reinado el elemento de conciliación que el Estado precisaba para efectuar una transición pacífica hacia un régimen democrático. En estas palabras, pronunciadas por el monarca en 1977, asistimos a uno de sus característicos llamamientos a la creación de un nuevo y próspero futuro para España, resaltando la fundamental importancia de su padre, don Juan de Borbón, en la consolidación de este proceso.

Sucesor de franco

Nieta de la reina británica Victoria I, Victoria Eugenia de Battenberg contrajo matrimonio en 1906 con el monarca español Alfonso XIII. Falleció en 1969, el mismo año en que su nieto, Juan Carlos, fue proclamado en España sucesor del general Francisco Franco a título de rey.

El 22 de julio de 1969 las Cortes (entonces una asamblea corporativa sin verdadero carácter representativo) le proclamaron sucesor de Franco a título de rey de acuerdo con los postulados de la Ley de Sucesión a la Jefatura del Estado de julio de 1947. Juan Carlos comenzó a ejercer desde entonces su parcela de representación institucional en tanto que sucesor del jefe del Estado mediante una serie de actividades oficiales que incluyeron viajes por el territorio español e incluso visitas a otros países.

En 1971 recibió por ley la función del ejercicio de la jefatura del Estado en caso de enfermedad o ausencia de Franco. Desde agosto hasta septiembre de 1974 y entre octubre y noviembre de 1975 la incapacidad por enfermedad de aquél le llevó a desempeñar esas prerrogativas y sustituirle en el desempeño del más alto cargo estatal.

Rey de España

El 22 de noviembre de 1975, dos días después del fallecimiento de Franco, fue proclamado rey de España por las Cortes, ante el escepticismo, cuando no la crítica generalizada, de la oposición al franquismo que veía en él a un mero continuador del régimen, sin que por ello fuera plenamente aceptado por los partidarios del mismo.

La Ley para la Reforma Política, promulgada el 4 de enero de 1977 por el rey Juan Carlos I, fue una pieza legislativa fundamental en el proceso de transición español a la democracia tras la dictadura del general Francisco Franco.

La transición democrática

Desde el inicio de su reinado, y ya incluso en su discurso del 22 de noviembre de 1975 ante las Cortes, manifestó abiertamente su posición favorable a la instauración de la democracia en España como medio de superar la división entre los españoles creada por la Guerra Civil y sus consecuencias. Para ello, mantuvo contactos con destacados dirigentes de la oposición democrática, lo que le llevó a enfrentarse con el presidente del gobierno, Carlos Arias Navarro, de quien le separaban profundas divergencias políticas y personales que provocaron en julio de 1976 su sustitución por Adolfo Suárez, artífice desde el gobierno del proceso de transición a la democracia.

Aun cuando su designación en 1969 como sucesor de Franco había supuesto un relativo enfrentamiento con su padre, el conde de Barcelona, que no aceptaba los postulados de dicha ley al no reconocerle sus derechos al trono como heredero de Alfonso XIII, Juan de Borbón terminó por aceptar la coronación de su hijo al ser el único medio de restablecer la monarquía en España. Así, en mayo de 1977, su padre le transmitió oficialmente sus derechos dinásticos.

El 6 de diciembre de 1978 se aprobó mediante referéndum una nueva Constitución (sancionada días después por el Rey) que limitó en gran medida sus poderes políticos de acuerdo con la tendencia general de las monarquías europeas parlamentarias. Desde entonces, las funciones de Juan Carlos I se centraron en ejercer una labor de arbitraje entre los distintos poderes e instituciones del Estado, además de encarnar la más alta magistratura de la nación.

Símbolo internacional

La actual familia real española es el mejor ejemplo de cómo la institución monárquica puede ejercer un papel moderador y consolidador del Estado constitucional y de Derecho. Sentados, los reyes de España, Sofía de Grecia y Juan Carlos I. En la fotografía no aparece Letizia Ortiz, princesa de Asturias desde su matrimonio con Felipe de Borbón el 22 de mayo de 2004.

Su prestigio se vio incrementado tras el intento de golpe de Estado del 23 de febrero de 1981, en el que su actuación personal fue decisiva para impedir el triunfo de la rebelión militar, valiéndose para ello de su condición de capitán general (máximo jefe) de las Fuerzas Armadas. También fue acreedor de distintos doctorados honoris causa por reputadas universidades españolas y extranjeras.