¿Cómo encontrar el equilibrio al disciplinar?

Hay que tomar en cuenta la personalidad de nuestro hijo y saber que el niño es lo que importa. La disciplina debe adaptarse a sus características y no al revés.

Cada niño es único. Incluso en la misma familia no podemos aplicar la misma disciplina a niños diferentes. Un pequeño sensible y frágil requiere menos fuerza que un niño fuerte y activo; un niño con un mayor desarrollo del lenguaje necesita más explicaciones.

También es importante comprender el momento por el que está pasando el niño y observar si se siente cansado, enfermo.

Fuente: Guía para padres de la Consejería de Educación y Cultura del gobierno de Extremadura