Estilo

Sabemos que los estilos de tipos utilizados en diseño son casi infinitos.

En el curso de los siglos, los tipos se han desarrollado desde letras formadas a mano, partiendo de las letras romanas, hasta las fundiciones manufacturadas de tipos de impresión, que son colecciones de alfabetos y números en un mismo estilo.

Éstas, a su vez, han evolucionado desde formas de letras -en madera, talladas a mano, pasando por tipos metálicos, hasta el presente, en que los tipos figuran en archivos computarizados.

En el momento de elegir los tipos adecuados para un diseño hay que establecer cuidadosamente la imagen que deseamos transmitir a través de los tipos.

Para comprender esto, comparemos un diseño que presente un producto o una idea nostálgica o anticuada, en el que el tipo utilizado debe crear un vínculo con el pasado y proyectar una imagen confortable y clásica, con otro diseño que presente un enfoque moderno, posiblemente de alta tecnología; en este caso, el tipo utilizado está desprovisto de fantasías y proyecta una imagen profesional y controlada.

Es importante recordar que los tipos del pasado son tan accesibles como los de hoy. Los tipos no se descartan nunca, al tiempo que aparecen regularmente tipos nuevos.

Hay, con todo, fases y modas distintas, especialmente en publicidad, y los tipos viejos reviven y se convierten en imágenes cotidianas y populares.

De modo alternativo, un tipo recién diseñado puede lograr enseguida una gran popularidad.

Hay que cobrar conciencia de las corrientes actuales y buscar los tipos que parecen utilizarse más en la publicidad y en las imágenes populares.

Hay que tener presentes numerosos factores si se estudia la posibilidad de mezclar diferentes estilo de tipos en un mismo diseño.

Como antes hemos dicho, el estilo del tipo debe armonizar con la naturaleza del tema.

El lector aprenderá a descubrir, mediante la experimentación y las comparaciones visuales, qué tipos funcionan bien juntos y son apropiados para una imagen.

Con objeto de hallar una fuente de referencia para los tipos, conviene hacerse de un archivo propio de tipos.

Hay que prestar atención especial al espaciado de las letras de las palabras, porque ello influirá en la imagen global.

Fuente: Taller de Tipografía Avanzada de la U de Londres