La soja o soya

Es un poroto oleaginoso que es originario de China pero que se está cultivando en grandes proporciones actualmente en América. Su importancia reside, entre otras características, en:

  • Su elevado porcentaje de aceite
  • Sus propiedades alimenticias por el elevado contenido en proteínas
  • Su consumo como poroto  
  • La obtención de los brotes para la alimentación
  • La utilización doméstica de leche y queso de soya.
  • La producción de harinas de soja
  • Su utilización como materia prima en diversas industrias.

En algunos países sudamericanos, como la Argentina, de tradición en la producción cerealera, recién se inició su cultivo en escala comercial, alrededor de 1960. En muchos países, especialmente los occidentales, con tradición culinaria basada en las proteínas animales, todavía está en vías de imponerse en la cocina cotidiana el uso de la soja y el consumo de poroto y derivados.

La cantidad de proteínas que contiene esta leguminosa oscila entre un 30 y un 45 %, por lo tanto contiene casi el doble de proteínas que la carne, y de la misma excelencia. La grasa del poroto soya también es de muy buena calidad, pues entran en su constitución, ácidos grasos no saturados, esenciales en una alimentación equilibrada.

Es pobre en hidratos de carbono, por lo que constituye un buen alimento para diabéticos. Y su harina contiene calcio y fósforo en proporción más elevada que la leche, aunque es pobre en hierro. Dos son los elementos que hacen que no se consuma demasiado el poroto soya:

  • Es de difícil cocción
  • No es muy sabroso

Para dar solución a la primera de las razones, bastará con recordar dejarlo en remojo durante la noche. Y para la segunda, se ofrecen en este sitio algunas recetas para preparar este alimento y que resulte agradable al paladar y nutritivo a la vez.