Comprométase a triunfar y sea entusiasta

Sam Walton estaba absolutamente decidido a hacer lo que fuera necesario para realizar sus sueños. Solía ir a trabajar a las 4:00 AM para poder revisar los informes de venta del día anterior y pensar un poco antes de que llegaran los demás ejecutivos. Para hacer realidad nuestros sueños es preciso que hagamos un esfuerzo extraordinario.

Uno de los aspectos más interesantes y menos conocidos del éxito de Wal-Mart es que Sam Walton buscaba personas sin educación formal y les enseñaba personalmente a ser exitosas y productivas. Estos ejecutivos, de extracción común, rendían a unos niveles superiores al promedio gracias al liderazgo y a la guía de Walton.

Sam Walton estaba sólidamente comprometido con sus objetivos y sueños. Contaba con el apoyo de su esposa, quien se dedicó por entero a la familia para que Sam se pudiera concentrar sus energías en crear el negocio. Esta es la razón por la que Sam Walton logró superar muchos desafíos, que limitaron los logros de tantas otras compañías.

Sam Walton se imponía objetivos ambiciosos y le encantaba involucrar en los mismos a toda la organización, a través de su energía y pasión. Trabajó incansablemente para mejorar en todo. En su tiempo libre, Sam Walton disfrutaba imaginando cómo mejorar la red de distribución de Wal- Mart, reducir costos, mejorar las relaciones con los socios y bajar los precios.

Pensaba constantemente en cómo lograr que el negocio continuara teniendo éxito. Una vez que perfeccionó la fórmula, se valió de sus ejecutivos para reproducir el éxito en cualquier circunstancia.

Sam Walton sabía lo que tenía que hacer para superar a la competencia porque conocía su negocio en todos los sentidos. Esto quiere decir que, cuando hablaba o hacía sugerencias, tenía mucha credibilidad. Estaba decidido a lograr que el negocio mejorara un poco cada día y retaba a todos sus colegas a superarse. Gradualmente, esta actitud positiva hizo que la gente lograra más de lo que se esperaba al comienzo. Nada en el mundo puede remplazar una buena actitud, cuando se trata de desarrollar y operar un negocio.

– Tenga grandes objetivos que realmente lo motiven e inspiren, y luego concéntrese en los mismos.
– Comprométase a hacer lo necesario para hacer realidad sus sueños.
– Haga todos los días algo que lo acerque a sus sueños.
– Mantenga la dirección; desarrolle ideas pero luego trate de que se hagan realidad.
– Mantenga una fuerte ética de trabajo; Dé el ejemplo.
– Vea todos los “problemas” como oportunidades para mejorar.
– Entrene su cuerpo y su mente para dar todo lo posible. No pierda contacto con la realidad.