Morteros hidráulicos

A diferencia de los morteros aéreos, los hidráulicos fraguan tanto al aire como en el agua. Se fabrican por calcinación a 1 400° C a partir de calizas y arcillas (aluminosilicatos), formándose silicato cálcico, aluminato cálcico, ferrito cálcico (según sea el contenido en hierro) y cal libre.

El contenido en Mg0 no debe ser superior al 5 % en el cemento Portland, por el peligro de la «expansión de la magnesia». El proceso del endurecimiento en los morteros hidráulicos se funda en una serie de transformaciones coloidequímicas entre las sustancias contenidas en el cemento y el agua de amasado.

Esta es absorbida por los silicatos y aluminatos y (análogamente a lo que sucede en la cola) se forman coloides muy resistentes a la temperatura a través de combinaciones entre los componentes.

El cemento se mezcla también con arena para preparar el mortero. Si la adición de arena tiene un tamaño de grano de hasta 7 mm se habla de morteros, mientras que si se utiliza grava (hasta 60 mm) se denomina hormigón.

Para formar el hormigón se puede emplear también trass, una caliza ligera ligera y porosa que contiene 30—40 % de un ácido silícico fácilmente soluble. La mezcla de trass y de cemento se endurece fácilmente bajo el agua.

La fabricación, composición y empleo de cales de construcción, cementos, morteros y hormigones están reguladas por numerosas normas y leyes de construcción.

Fuente: Apuntes de procesos químicos de la UNIDEG